martes, 20 de mayo de 2014

El trastero


Dame tus más, me quedaré con tus menos. Regálame un mundo entero, me quedaré con tus manos y un trocito de tu cielo, tu pecho. Quiéreme de cerca, ódiame de lejos. Quiero hacer de tus virtudes mis defectos, entre eslabones y peldaños, entre familiares y extraños, entre lo que nos toca y lo que escogemos, lo que heredamos y lo que compramos, la herencia aquí, la preferencia por otro lado. Tus puntos negros son mi perfecto blanco, mi arma letal, mi implacable daño. Entre tantas piezas de tantos puzles, entre tanto engranaje, entre tanto azufre, vas a ser tu quien me diga quién me levanta o quién me hunde? ni lo pienses, ni lo dudes. Soy mi yo obligada y mi yo opcional, soy lo que me dieron pero también lo que yo me quise labrar. No busco piezas con las que encajar, yo pulo las partes con las que quiero formar... formar momentos, formas risas, formar llantos, te suena? esas familias que se eligen en vida? Eres y sois el mosaico perfecto, mi dispar collage, mi particular jardín. Porque sois mis flores de colores, sois mis antojos, sois mis victorias, sois mis derrotas, sois mis diferencias. Sois yo en toda mi esencia. Sois las perspectivas que no alcanzo, sois mis ventanales a otros paisajes, sois las azoteas de mi mirar más alto, sois lo que sola no soy capaz de ser, sois mucho y muy diverso, pero entre mis venas os paseo, os acuno, os mimo y os agradezco. Porque vosotros sin mí no sois vosotros, y yo sin vosotros no podría ser.

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